Todo igual

Me gustaría poder escribir en mi blog, me encanta escribir, pero desde que lo he creado parece que me haya quedado sin argumentos.
La verdad es que todo esta bastante tranquilo ahora, y tampoco tengo ningún derecho a quejarme, ¿qué mas se puede pedir?
Sin ninguna duda siempre ando en constante búsqueda, nada tiene que ver la tranquilidad que me rodea en el exterior, con la inquietud que me agita por dentro a todas horas, el volcán que esta despierto y que, yo creo, en cualquier momento explotará por algún lado.
Cuando en poco tiempo, se derrumba todo lo que pensabas que ya sería tu vida, te quedas como desorientado, perdido, como diciendo ¿y ahora pa donde tiro?.
Siempre planeando algo, no puedo parar, no puedo parar. Intentando aprovechar al máximo el tiempo ¿perdido? y haciendo todo lo que (a lo mejor) debería haber hecho en otros tiempos. De momento prefiero no quedarme parada, vivir así, inquieta, tener siempre algún plan en la cabeza. No me he quedado quieta desde que pasó aquello, y no pienso hacerlo hasta que no este segurísima que cuando no haga nada, no tenga absurdas pajas mentales que me nublen la visión de la realidad.